Hembra preciosa, buena, juguetona.
Muchos han preguntado por ella pero al saber que estaba castrada no la han querido adoptar.
LLEVA CON NOSOTROS DESDE OCTUBRE DE 2019, es una pena!!
No nos gustaría que perdiera su alegría y que se habituara a que lo normal es vivir entre rejas con una cama de plástico, fría y sin nadie que la acaricie y juegue con ella cada día.